Última actualización 19 junio, 2018
La sabiduría en el colegio, en la universidad, en la mente del profesor; la ignorancia, la barbarie, el conocimiento menor en el populacho, en la tradición o en el sempiterno aprendiz. Ese es el esquema clásico decimonónico, el cual reproduce una absoluta mentira: la sapiencia está en todos lados. Y los refranes nos lo demuestran más que bien, ya que son pequeñas frases, muchas veces sujetas a verso y ritmo, que demuestra algo, dan algún conocimiento, a veces en tópicos tan variados que llama la atención. Hay que escuchar o leer los refranes, por eso aquí te llenamos de muchos populares arraigados en América Latina ¡No te lo pierdas!
Refranes Populares Mexicanos
- «¡A darle que es mole de olla!». Invitación a hacer algo con buen ánimo, con ganas y, sobre todo, sin demora. Mole de olla refiere a un plato mexicano que por lo menos para el saber y paladar popular es delicioso.
- «Agua que no has de beber, déjala correr». Es un dicho muy extentido en todo el habla hispana, por lo que su génesis es una gran discusión. Más allá de eso, es muy utilizado este refrán en México y da cuenta de un hecho notorio: no involucarse en los asuntos que no son de incumbencia propia.
- «A ver a un velorio y a divertirse a un fandango». La enseñanza es diáfana: las ocasiones para divertise se aprovechan; y las de seriedad se respetan con análogo ánimo. El fandango es un estilo de baile autóctono de España y festivo.
- «Cuesta más caro el caldo que las albóndigas». Habla de que a veces lo superfluo o trivial es costoso y lo sustantivo no tanto o, en realidad, menos que lo primero.
- «Para uno que madruga hay otro que no se duerme». Es un refrán muy interesante porque apela al conocimiento de la realidad y a la competitividad que a veces desconocemos. Es decir, siempre hay una persona más diestra en algo.
Refranes Populares Colombianos
- «A gato viejo, ratón tierno». Habla de las diferencias de naturaleza y, sobre todo, el contraste entre la sabiduría y la carencia de ella, muy asociada siempre a la vejez en el primer caso y la tierna juventud en lo primero.
- «Pan duro, pero seguro». En algún momento se tendrá que hacer un trabajo sobre refranes del hambre, porque existen en todo el mundo y Colombia no es la excepción. Este refrán por lo tanto se lo puede comprender en la literalidad, pero también como metáfora de toda situación que es negativa pero que de todos modos es mejor antes que nada.
- «Por el árbol se conoce el fruto». Habla del origen de las cosas y su influencia en la descendencia: si es bueno el árbol así será el fruto como a la inversa. Muy esgrimido para dar cuenta de la relación padre-hijo.
- «Dinero sin caridad es pobreza de verdad». Refrán que apela a la solidaridad, al dar cuando sobra, al dar porque es mejor que recibir. En ese sentido, el ávaro que tiene es el verdaderamente pobre, ya que lo es de espíritu.
- «Más vale ser cola de león que cabeza de ratón». El dicho es muy elocuente: es mejor ser el el peor de los mejores, pero estar entre los mejores y no ser el mejor de los peores, valga la redundancia, debido a que lo último no contrae ningún elogio.
Dichos y Refranes Venezolanos
No hay tópico específico para el refrán, ya que la sabiduría humana no tiene límites, es intempestiva y no conoce de tapujos. En Venezuela también sucede así, por eso aquí te dejamos una buena cantidad de dichos o refranes que exudan algún conocimiento, cierta enseñanza, que por ser de carácter práctico no tiene menos valor; al contrario, su instrumentalidad puede ser inmediata.
- «Más sabe el diablo por viejo que por diablo» (La sabiduría, por más que hable de una figura negativa, vienen sobre por con la vejez, con el peinar canas en el que todo se ha visto y poco se desconoce).
- «Águila no caza mosca» (El águila es fuerte, poderosa; pero sobre todo gallarda, inteligente y ponderadora de sus rivales. Por eso, naturalmente, no se coloca en igualdad con menores. Es un dicho que apela a la clase de la persona y a no rebajarse bajo cualquier circunstancia).
- «No gastes pólvora en zamuros». Habla de no gastar energías en realidades o cuestiones que no valen la pena. El zamuro es un animal carroñero, lo cual le ha dado en el imaginario popular una naturaleza vil o baja. En la Argentina se suele usar mucho otro animal con las mismas predilecciones alimentarias: el chimango.
- «Niño que nace barrigón, ni que lo fajen de chiquito». Habla de la naturaleza emperdernida, de esa forma de ser, por lo general negativa, que no podrá ser cambiada en alguien por más que se lo intente o pasen los años. Aquí fajar es literalmente faja que sostiene gorduras de un niño entrado en peso y no golpear, como puede entenderse en otros países.
- «A correr piojo que viene el peine». Menciona la presencia de una autoridad, el instaurar un nuevo orden que barre con todo lo viejo.
Dichos y Refranes Peruanos
Seguimos con la lista de dichos y refranes, por lo que ahora le toca a Perú.
- «Jóvenes a la obra, viejos a la tumba». Da cuenta del necesario cambio generacional, de cómo el tiempo pasa a todos. Si se quiere es un dicho muy crítico porque reconoce que el hacer tarde o temprano recae en los nuevos y no en los sempiternos. Una maravillosa figura del poder y contra quienes quieren anquilosarse en el mismo.
- «No llores como mujer lo que no has podido conseguir como hombre». Un refrán sumamente machista, pero no nos puede sorprender: a veces estos constructos son históricos y remontan a épocas muy pretéritas. Se pone, en estricto, que no puedes llorar por aquello que no tuviste coraje de luchar. Es decir, el coraje es masculino y el llanto un vil índice de femeneidad.
- «Quien mucho abarca, poco aprieta». Es un refrán sumamente extendido en España y sus ex colonias, por eso hablar de origen es relativo. En lo atinente al mismo, da cuenta de la ambición, de aquel que no asegura lo pequeño que tiene y se somete a innecesarias y peligrosas empresas ¿La moraleja? Quizás por desmesura lo pierda todo o se quede con poco.
- «No se gana, pero se goza». En la vida nos llenamos de situaciones en las que no resultamos ganadores ni mucho menos cumplimos el cometido; sin embargo, el proceso fue bello, placentero o divertido. Es una victoria pírrica a la que apela este refrán, pero en el sentido opuesto: si la primera es conseguir el resultado con muchas consecuencias negativas, este dicho apela a una derrota gozosa.
- «A pan duro, diente agudo». Otro dicho del hambre, siempre positivo en cuanto a que por lo menos esa realidad reconforta antes que nada. El diente es agudo porque el pan es pan y se acepta de todos modos.
Dichos y Refranes Bolivianos
- «Del dicho al hecho, hay un largo trecho». Un refrán muy popular en Bolivia y en otros países del habla hispana. Da cuenta que es fácil hablar, pero llevar esos vocablos al acción y, ulteriormente, al resultado, cuesta mucho trabajo.
- «Vas a terminar como palomillo». Persona de muy mal andar por la vida, con muchas adicciones y hábitos sumamente censurables.
- «Anda a moler agua». Expresión que se utiliza para mandar bien lejos a una persona que no agrada mucho; es decir, un insulto.
- «Bien opa este t`ara». Son dos vocablos posiblemente en aymara que dan cuenta de una persona lenta, tonta, excesivamente parsimoniosa en su intelecto.
Dichos Populares Paraguayos
Paraguay tiene muchos refranes españoles, pero también algunos propios guaraníes, bien autóctonos.
- » Vayan ustedes primero, dijo el que tenía roto el pantalón». Un refrán de oportunismo, de quien hace o no hace según su condición actual.
- «Se me calienta la cabeza, dijo una muchacha que llevaba un puchero caliente sobre aquella». Este es un refrán autóctono, más gracioso que didáctico. Calentar la cabeza es literalmente enamorarse.
- «Le pegó todito mal». Dicho que hace referencia a alguien que recibió una golpiza.
- «Después ahora te voy a traer». Es un calco de una frase guaraní y, aunque no se crea, el vocablo ahora no menciona el presente sino algo que puede hacerse con el tiempo e incluso no realizarse nunca.
- «Quien no ama a su madre no sirve para esposo». De origen guaraní, da cuenta del respeto y honra que se le debe a las mujeres.
- «No debes entregarte mucho a una mujer, si quieres que te ame por mucho tiempo». También es un refrán histórico y da cuenta de un tópico en el amor recurrente: nada de pasión sempiterna, de demostrar excesiva candidez porque eso significa caer en el poder del otro. La frialdad y el desapego vienen bien de vez en cuando, sobre todo en relaciones que se piensan largas.
- «La suerte y la piedra no las buscamos; solo nos topamos con ellas». Era una forma de consolar al perdedor o desalentar a la persona a que continúe jugando. Claramente hablamos de los ludismos de azar.