Saltar al contenido
Imágenes Bonitas con Frases Gratis

Maravillosas Frases de Julio Cortázar

Última actualización 6 diciembre, 2018

Julio Cortázar seguramente ha dejado su huella como un eximio escritor latinoamericano, con una capacidad de reflexión, sensibilidad e imaginación que pocos otros han tenido. A continuación, en una hermosa recopilación, te presentamos maravillosas frases de Julio Cortázar. 

Las 70 mejores frases de Julio Cortázar

  • Regalos insignificantes como un beso en un momento inesperado o un papel escrito a las apuradas, pueden ser valorados más que una joya.
  • Parezco haber nacido para no aceptar las cosas como me han sido dadas.
  • El absurdo es que salgas por la mañana a la puerta y encuentres la botella de leche en el umbral y te quedes tan tranquilo porque ayer te pasó lo mismo y mañana te volverá a pasar.
  • La esperanza le pertenece a la vida misma; es la vida misma defendiéndose.
  • La humanidad empezará verdaderamente a merecer su nombre el día en que haya cesado la explotación del hombre por el hombre.
  • Considero, sin dudar, a las mujeres el ser más bello, porque poseen rebeldía y eso es lo que todo ser humano debe esperar.
  • Las palabras nunca alcanzan cuando lo que hay que decir desborda al alma.
  • No podemos hablar de etapas sin presuponer una meta.
  • La cultura es el ejercicio profundo de la identidad.
  • Incapaz de luchar contra tanto pasado, abrió los ojos y se enderezó.
  • Andábamos sin buscarnos pero sabiendo que andábamos para encontrarnos.
  • Todo hay que volver a inventarlo y el amor no tiene que ser una excepción.
  • Ven a dormir conmigo; no haremos el amor, el amor nos hará.
  • Hay ausencias que representan un verdadero triunfo.
  • Pobre amor el que de pensamiento se alimenta.
  • Toda mañana es en la pizarra de mi mente, donde te dibujo y te invento.
  • Total parcial: te quiero. Total general: te amo.

  • ¡Música! Melancólico alimento para lo que vivimos de amor.
  • Los libros van siendo el único lugar de la casa donde todavía se puede estar tranquilo.
  • Nunca renuncio a nada; solo hago lo que esté a mi alcance para que las cosas renuncien a mí.
  • No es que tengamos la obligación de vivir, ya que la vida nos fue dada. La vida se vive a sí misma, lo queramos o no.
  • ¿Cómo iba a saber que lo que parecía mentira era verdadero?
  • Las costumbres son formas concretas de ritmo, son la cuota de ritmo que nos ayuda a vivir.
  • En realidad las cosas verdaderamente difíciles son todo lo que la gente cree poder hacer a cada momento.
  • Nada está perdido si se tiene el valor de proclamar que todo está perdido y hay que empezar de nuevo.
  • Nos queríamos en una dialéctica de imán y limadura, de ataque y defensa, de pelota y pared.
  • ¿Hasta cuándo vamos a seguir creyendo que la felicidad no es más que uno de los juegos de la ilusión?
  • Por eso no seremos nunca la pareja perfecta, si no somos capaces de aceptar que solo en la aritmética el dos nace del uno más del uno.
  • Como no sabías disimular me di cuenta enseguida de que para verte como yo quería era necesario empezar por cerrar los ojos.
  • Si te caes, te levanto; sino me acuesto contigo.
  • Hasta lo inesperado acaba en costumbre cuando se ha aprendido a soportar.
  • Déjame entrar, déjame ver algún día como ven tus ojos.

  • Si la personalidad humana no adquiere toda su fuerza, toda su potencia, entre las cuales lo lúdico y lo erótico son pulsiones fundamentales, ninguna revolución va a cumplir su camino.
  • La gente se cree amiga porque coincide algunas horas por semana en un sofá, una película, a veces en una cama o porque les toca hacer el mismo trabajo en una oficina.
  • Detrás de este triste espectáculo de palabras, tiembla indeciblemente la esperanza de que me leas, de que no haya muerto del todo en tu memoria.
  • Mi maligna manera de entender el mundo me ayudaba a reírme por lo bajo.
  • La verdad que no me importa si no entiendo a las mujeres, lo único que vale la pena es que lo quieran a uno.
  • Creo que todos tenemos un poco de esa bella locura que nos mantiene andando cuando todo alrededor es tan insanamente cuerdo.
  • Buscas eso que se llama armonía, pero la buscas justo ahí donde acabas de decir que no está, entre los amigos, la familia, la ciudad.
  • No te voy a cansar con más poemas. Digamos que te dije nubes, tijeras, barriletes, lápices y acaso alguna vez sonreíste.
  • Mi interés se volvió bien pronto analítico. Casando de maravillarme, quise decir; he ahí el invariable y fin de toda aventura.
  • Lo que valemos algo aquí ya no estamos seguro de nada. Hay que ser un animal para tener convicciones.
  • La realidad está ahí y nosotros en ella, entendiéndola a nuestra manera, pero en ella.
  • El psicoanálisis demuestra cómo la contemplación del cuerpo crea complejos tempranos.
  • Como si se pudiera elegir en el amor, como si no fuera un rato que te parte los huesos, y te deja estaqueado en la mitad del patio.
  • Muchas personas piensan que amar es elegir a una mujer y luego casarse con ella. La eligen, he visto cómo lo hacen; como si fuera posible elegir en el amor.
  • No puedes escoger a la lluvia que te va a mojar y hacer que tengas frío cuando salgas de un concierto.
  • Al citar a los demás, nos citamos a nosotros mismos.
  • A veces, deseaba que hubiese alguien que, como yo, no se ajustara perfectamente a su era, pero esa persona era difícil de encontrar. Luego encontré a los gatos, en los que veía un comportamiento parecido y los libros.

 

  • Creo que no te quiero. Creo que solo quiero la imposibilidad tan obvia que es quererte. Es como el guante izquierdo que está enamorado de la mano derecha.
  • La memoria es un espejo que miente de forma escandalosa.
  • Debo decir que confío plenamente en la casualidad que hizo que nos conociéramos. Nunca te olvidaré y si lo intento, estoy seguro de que no lo lograría.
  • Me encanta verte y hacerte mío solo con verte aunque sea de lejos. Me encantan cada uno de tus lunares y tu pecho es como el paraíso.
  • Apenas nos conocíamos y ya la vida estaba planeando separarnos.
  • No eres el amor de mi vida, ni el amor de mis días, ni de mi momento. Sin embargo, yo te quise y te sigo queriendo, a pesar de que no estemos destinados a estar juntos.
  • Me miras, me miras de cerca, cada vez más cerca y luego nos volvemos cíclopes. Nos vemos más cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan.
  • Todas las distracciones abren ciertas puertas. Tienes que permitirte distraerte cuando no seas capaz de concentrarte.
  • Pero qué es la memoria sino un lenguaje de sentimiento, un diccionario de caras, días y olores que se repiten con verbos y adjetivos en un discurso.
  • Cuando piense en ti, solo será un pensamiento oscuro que trata de acordarse de ti.
  • Amor mío, no te quiero por ti o por mí, no te quiero por los dos juntos. No te quiero porque la sangre me obligue a quererte. Te quiero porque no eres mía, porque estás en otra parte y me invitas a saltar pero no puedo hacerlo.